FILADELFIA — Los Filis de Filadelfia ganaron la División Este de la Liga Nacional por primera vez desde 2011, al asegurar el título divisional con una victoria de 6-2 sobre los Cachorros de Chicago el lunes por la noche.
Kyle Schwarber y J.T. Realmuto conectaron jonrones. Los fanáticos de los Filis se volvieron locos. Y el lanzador Aaron Nola dio una muestra de lo bien que se sentiría la franquicia si Filadelfia llegara hasta el final esta vez.
Los Filis habían colocado una lona enrollada sobre los vestuarios de la casa club antes del juego, una vista protectora familiar para el descorche que se avecinaba para un equipo que ha llegado a los playoffs cada una de las últimas tres temporadas bajo el mánager Rob Thomson.
“Sabemos que tenemos un panorama muy grande por delante”, dijo Schwarber antes del juego. “Ganar la división es algo muy importante. Si salimos y hacemos lo que tenemos que hacer esta noche, será algo bien merecido. No es una división fácil de ganar. Nunca ha sido una división fácil de ganar. Definitivamente será algo genial”.
Oh, hizo frío en Filadelfia para un estadio lleno anunciado de 42.386 espectadores, con temperaturas de alrededor de 60 grados, un adelanto del clima de octubre.
Eso le viene muy bien a este equipo.
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Con al menos un comodín de la Liga Nacional ya asegurado la semana pasada, Schwarber, Bryce Harper, Trea Turner y compañía obtuvieron el campeonato divisional número 12 de la franquicia y tienen la vista puesta en el primer puesto en los playoffs de la Liga Nacional.
Los Phillies (93-64) ocupan el puesto número 2, justo detrás de los Dodgers de Los Ángeles (93-63) y obtendrían un pase directo a la primera ronda si la clasificación se mantiene.
“Lo más importante para mí, en realidad, es ganar la división y conseguir el pase directo”, dijo Thomson. “Si tenemos la ventaja de jugar de local, eso es una ventaja. Pero no pondré a nuestros jugadores en peligro para llegar allí”.
A los Phillies les quedan dos juegos contra los Cubs y cierran la temporada con una serie de tres juegos en Washington.
Con las apariciones en los playoffs ahora como la norma para los Phillies, tal vez la inevitabilidad de todo esto mantuvo a algunos fanáticos en casa. Después de agotar las entradas para un partido tras otro durante una temporada sensacional, hubo algunos asientos vacíos en el Citizens Bank Park, que contó con más de 3,2 millones de aficionados.
Thomson dijo una vez que un entrenador rival le dijo que un partido de playoffs en Filadelfia era “cuatro horas de infierno”.
“Siento que es el mejor ambiente en los deportes”, dijo el relevista All-Star Jeff Hoffman. “Se siente como si fueran 50.000 contra nueve. Siempre es una buena sensación cuando entras al campo”.
Los aficionados de los Phillies fueron recibidos con la palabra “CLINCHED” en el tablero de video afuera del Citizens Bank Park, mientras que la entrada principal mostraba a Harper y Nola como las fotos principales en un cartel que decía “Make More HISTORY”.
Filadelfia puso fin a la racha de seis títulos consecutivos de Atlanta en la División Este de la Liga Nacional y está tratando de terminar con el mejor récord de las Grandes Ligas y la ventaja de jugar en casa durante toda la postemporada.
En busca de su tercer campeonato de la Serie Mundial luego de los títulos de 1980 y 2008, los Phillies superaron a Atlanta en el liderato de la división el 3 de mayo y no han estado atrás desde entonces.
Filadelfia ganó cinco títulos consecutivos de la División Este de la Liga Nacional entre 2007 y 2011, luego pasó 10 años sin llegar a los playoffs. Los Phillies, que ingresaron como comodín en cada una de las últimas dos postemporadas, lograron rachas consecutivas en octubre que terminaron en desilusión.
Llegaron a la Serie Mundial de 2022, perdiendo ante Houston en seis juegos, y perdieron una Serie de Campeonato de la Liga Nacional de siete juegos ante Arizona el año pasado después de liderar a los Diamondbacks, que no eran favoritos, por 2-0 y 3-2.
El camino hacia este título de división fue un poco complicado después de que el equipo logró el mejor comienzo de 50 juegos en las mayores desde Seattle en 2001. Los Phillies tuvieron una mala racha en el verano y regresaron a casa esta semana luego de un viaje de 2-5 contra Milwaukee y los Mets de Nueva York.
Ambos son equipos a los que los Phillies podrían enfrentarse en octubre.
Parecía apropiado que Nola, de 31 años, estuviera en el montículo para el partido decisivo. Nola fue seleccionado en la primera ronda del draft por los Phillies en 2014, debutó al año siguiente y ha estado con ellos toda su carrera. Ha sido uno de los lanzadores más confiables del béisbol, un bien valioso con la presión moderna sobre los bullpens de las Grandes Ligas.
Nola ayudó a Filadelfia a conseguir un comodín de la Liga Nacional el año pasado, luego tuvo marca de 3-1 con una efectividad de 2.35 en cuatro aperturas de playoffs. Hizo cinco aperturas de postemporada en 2022, con marca de 2-2 con una efectividad de 4.91.
Nola solo probó brevemente el mercado de agentes libres la temporada baja pasada antes de firmar un contrato de siete años por 172 millones de dólares para quedarse con los Phillies.
Su recompensa es otra oportunidad de postemporada para llevarse a casa un título de la Serie Mundial que ahora lleva 16 años.
