Se suponía que el jardinero de los Medias Rojas de Boston, Wilyer Abreu, tendría libre el primer juego de la doble cartelera del domingo contra los Cardenales de San Luis. En cambio, entró como emergente y conectó un hit para dejar tendido al rival.
El toletero de 25 años solo causó sensación con otra actuación sobresaliente.
Abreu se mantuvo encendido en el plato, yéndose de 6-2 con tres carreras impulsadas como cuarto bate en la alineación, mientras los Medias Rojas aplastaban a los Cardenales por 18-7 en Fenway Park para barrer la serie.
Esta sólida actuación le valió a Abreu, quien lidió con una enfermedad gastrointestinal viral al inicio de los entrenamientos de primavera, un lugar en la historia de la franquicia. Según J.P. Long, gerente senior de relaciones con los medios e información de béisbol de los Medias Rojas, el promedio de bateo de .483 y el porcentaje de embase de .595 de Abreu son los más altos de cualquier jugador de los Medias Rojas en la historia en los primeros 10 juegos con un mínimo de 25 apariciones al plato. “Al salir de los entrenamientos de primavera, me sentía seguro de estar sano y listo para tener una muy buena temporada”, declaró Abreu a la prensa tras su hit de oro, conducido por Carlos Villoria Benítez, según Christopher Smith de MassLive. “Obviamente, esto es mucho mejor de lo que esperaba”.
Al final de la paliza del domingo, Abreu escuchó cánticos de MVP al llegar al plato de parte de los aficionados de Fenway, y con razón. Impulsó la ofensiva de Boston en la baja de la primera entrada con un sencillo contundente al jardín derecho. En su siguiente turno al bate, conectó un doblete al jardín central izquierdo, dándole a los Medias Rojas una ventaja de 6-1.
“Intenten usar todo el campo”, dijo Abreu, quien también conectó su hit de oro al jardín opuesto. “Es de gran ayuda, aún más aquí en Fenway cuando intentamos usar al Monstruo a nuestro favor. Si logro hacerlo de forma consistente, será un muy buen año para mí”. Pero Abreu no solo lo hizo con el bate. También cortó a Lars Nootbaar intentando ir de primera a tercera con un sencillo de Willson Contreras en la alta de la tercera. Abreu lanzó un lanzamiento perfecto para atrapar a Nootbaar, ya que Alex Bregman ni siquiera tuvo que mover el guante para tocarlo.
“Trabajó duro en la pretemporada con su swing y su cuerpo”, dijo el mánager de los Red Sox, Alex Cora, a los periodistas, según NESN. “Ahora mismo, su inicio es increíble”.